Edición N° 413 - Septiembre 2017

En el aniversario de Asunción se desnuda el abandono de la Madre de Ciudades

 

La capital paraguaya, que fuera fundada por el español Juan de Salazar y Espinoza el 15 de agosto de 1537 y recibiera oficialmente el nombre de La Muy Noble y Leal Ciudad de Nuestra Señora Santa María de la Asunción el 16 de septiembre de 1541, acaba de celebrar su 480 aniversario. Fue erigida como un fuerte rodeado de alta empalizada, con miras a salvaguardar la integridad de los primeros pobladores que arribaron con él remontando el río Paraguay. No hay ningún documento que pruebe con certeza esta información, puesto que todo se había perdido con el gran incendio ocurrido en esos años iniciales.

Actualmente, Asunción es la ciudad más densamente poblada del país y es la que sufre agresiones de todo tipo. Éstas van desde la polución sonora y contaminación debido al caos vehicular, las vías de comunicación en pésimas condiciones, la maraña de cables aéreos, y su patrimonio histórico cultural degradado permanentemente.

Desde hace años, el Centro Histórico fue abandonándose gradualmente, tanto, que muchos sectores ya parecen una ciudad fantasma. Aún hoy, existen manzanas que visiblemente parecen no formar parte del conjunto más o menos conservado. Los ejemplos de nuestro patrimonio más modesto, con cierto valor arquitectónico, son los más descuidados y están en verdadera ruina. En nombre del progreso, se priorizó la construcción de edificios en altura, incluso adyacentes a ejemplos valiosos que quedaron fuera de escala o perdieron su visibilidad estética.

Ver Asunción en estas condiciones desalienta y cuesta creer que la solución sea posible dada la desidia con la que se encararon algunos proyectos surgidos del entusiasmo de los idealistas. Muchos comerciantes y unos pocos pobladores se unieron para volver a jerarquizarla, para defender a Asunción del deterioro rampante y procurar que la gente vuelva a vivir en la capital. Repoblar Asunción era la premisa, así como alguna vez hizo Asunción para repoblar Buenos Aires y de ahí el noble título de Madre de ciudades.

El problema que nos atañe es de larga data y pasaron muchas administraciones municipales a las que pareció no importarles Asunción. Más allá de anunciar con bombos y platillos que la capital volvería a recuperar su antigua estampa, no hicieron casi nada para remediar el problema. Ciudadanos comunes, artistas, profesionales arquitectos, y conservacionistas, coincidieron en señalar que nunca Asunción estuvo tan mal. Que, en honor a sus 480 años de existencia, no se merece estar en estas condiciones. Sin embargo hubo intentos. Y entonces se pensó que con gigantescos grafitis se podría mejorar en algo el paisaje urbano o por lo menos hacer que la gente levantara la cabeza para mirarlos y pasar por alto las veredas destruidas, fachadas enteras manchadas de humedad con revoques caídos y los ladrillos a la vista; las centenarias puertas de maderas nobles lucen hoy desconchadas; los balcones, opacos y sin sentido; ventanas y puertas negadas con burdas tapias de ladrillo. Los enormes árboles, parásitos, como el guapo’y, plantas de todo tipo, y líquenes, se adueñaron de la arquitectura que alguna vez formó parte del acervo de la “Asunción de mis amores”, la “Asunción de los jazmines floridos”.

El pasado 14 de agosto, Día de la Bandera, se desplomó la fachada de lo que fuera un patrimonio arquitectónico sobre la calle Estrella casi 14 de Mayo. La misma no tenía soporte sólido y al haber sido construida con adobe, con la constante vibración se vino abajo. Con el afán de la conservación y puesta en valor, los encargados de la construcción socavaron todas las paredes interiores, dejando la fachada expuesta.

 

La Gran Asunción

La capital forma parte del área denominada Gran Asunción la cual incluye a las ciudades de Luque, Fernando de la Mora, San Lorenzo, Lambaré, Mariano Roque Alonso, Ñemby, Capiatá, Limpio, San Antonio, Villa Elisa, e Itauguá, que forman parte del departamento Central. Este conglomerado de ciudades tiene una población estimada en más de dos millones doscientas mil personas, en 1029 km2, de los cuales, Asunción ocupa 117 km2.

Asunción recibe a más un millón doscientas mil personas que vienen a trabajar -o a realizar otras actividades- con el consiguiente problema de embotellamiento en las horas pico, además de la polución sonora y ambiental que se genera.  Es sede de los tres poderes de la nación cuyos edificios están desperdigados en toda su superficie. Actualmente existe el criterio y el proyecto, que forma parte del Plan maestro del Centro Histórico de Asunción (Plan CHA), que reubicará varias dependencias del estado en edificios en altura en el predio del puerto de Asunción. Se concentran también las principales entidades bancarias, culturales, económicas y diplomáticas, además de las educativas, sociales, gremiales, e industriales.

 

Vías de acceso a la capital

A Asunción actualmente se accede por varias nuevas avenidas y autopistas que, en su conexión con otras troncales, incluyen pasos a nivel y túneles. Estas vías hacen que pobladores de ciudades vecinas puedan acceder con mayor rápidez al centro de la ciudad y llegar al microcentro a través de la avenida Costanera.

Algunas de estas grandes obras viales aún no fueron terminadas en su totalidad y ya presentan defectos en su construcción. Es el caso del nuevo túnel de la avenida Madame Lynch que se inundó en una de las lluvias torrenciales.

Entre las grandes deudas de Asunción y su área metropolitana figura la deficiencia de los desagües cloacal y pluvial. El primero corre en algunos sectores a cielo abierto mientras que el último, en muchos casos, se ha cobrado ya la vida de personas y ocasionado grandes daños materiales a causa  de los furiosos raudales en época de intensas lluvias.

Otra es la gran maraña de cables de todo tipo que cruzan la ciudad de lado a lado y que ni las estatales de electricidad, Ande, y comunicaciones, Copaco, se dignaron jamás ocultar a la vista de los pobladores. Asimismo, los cables sueltos, en días de lluvia son motivo de prolongados cortes de energía, además del sabido peligro de muerte por electrocución.

Existen, por doquier, predios baldíos y casas abandonadas por sus dueños, creándose ahí focos de infestación del temible mosquito Aedes aegipti, transmisor del dengue, chikungunya y zika. Pero al parecer, nada se salva de la desidia en Asunción, pues los cementerios también muestran su cuota de deterioro y descuido.

 

El Metrobús, un tema latente

Para el año que viene se espera ya contar con el primer sistema Metrobús, en nuestro país. Partiendo de Asunción y cumpliendo cuatro etapas, llegará a la ciudad de San Lorenzo. Transitará por la avenida Eusebio Ayala, luego seguirá por la ruta Mariscal, Estigarribia, cruzando la ciudad de Fernando de la Mora, hasta llegar a su última estación. Para la implementación del sistema se replantea llevar en forma subterránea el tendido eléctrico, la red de fibra óptica, y de agua corriente. También se hará el cambio total de los colectores de desagüe cloacal y pluvial a lo largo del corredor del Metrobús. Anunciaron en medios oficiales que las obras avanzan según el cronograma de ejecución, pese a las últimas lluvias.

Se espera que con estos avances se puedan realizar las obras complementarias de revitalización del microcentro de Asunción que incluirá la puesta en valor de los patrimonios tangibles de los barrios, La Encarnación, General Díaz, La Catedral, San Roque, Gaspar Rodríguez de Francia, Loma San Gerónimo, Chacarita Alta, Ricardo Brugada, Varadero, San Antonio, Itá Pytã Punta, Sajonia, y al otro lado de la bahía de Asunción, los barrios San Felipe y Tablada Nueva.

 

La idea de revitalizar Asunción

La idea de renovar Asunción surgió de la convocatoria y entusiasmo de algunas organizaciones, grupos, colectivos, y pobladores del Centro Histórico asunceno para discutir la problemática que rodea al tema. De este encuentro surgió una serie de inquietudes de las diferentes agrupaciones y la implementación del Plan CHA.

La reunión, realizada el pasado febrero en la sede del Archivo Nacional, sirvió para generar un espacio de debate sobre la problemática del Centro Histórico y proponer las estrategias para su revitalización a partir de las iniciativas urbanas y culturales

Los invitados a participar de este Grupo impulsor para la revitalización del CHA fueron las organizaciones culturales, sociales y gremiales vinculadas directamente a la ciudad.

En la primera reunión estuvo presente casi medio centenar de personas provenientes de colectivos tales como: Crear en libertad, Fotociclo, Promúsica, Bicicentro, El Granel/Puerto Abierto, Rema (Corporación para el desarrollo sostenible de la región metropolitana de Asunción), Asunción vibra, Federación paraguaya de ciclismo, Buena vista social club, Loma San Jerónimo, Koga, Asunción en las calles, Guyra Paraguay, Kurtural, además de miembros del Icpa (Instituto Cultural Paraguayo-Alemán), del Centro Cultural de España Juan de Salazar, y arquitectos, estudiantes de arquitectura y habitantes del CHA.

Los integrantes del equipo técnico explicaron que el Plan CHA nació en el 2014 como un proyecto impulsado por el Gobierno Nacional y la Municipalidad de Asunción que se basa en diez estrategias, 100 acciones y 40 proyectos concretos que se quieren realizar a largo plazo.

 

Multisectorial para nuevos impulsos

En la primera quincena del pasado mes de agosto se realizó una reunión con la presencia de los titulares y representantes de quince instituciones públicas que incluyó a ministerios, secretarías ejecutivas, entes estatales y la comuna asuncena. La reunión del Consejo del Plan CHA se desarrolló en la sede del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (Mopc).

En la ocasión, el ministro de la Secretaría Nacional de Cultura (SNC), Fernando Griffith, secretario ejecutivo del Plan CHA, hizo una presentación en la que se abordaron los avances del 2017 en las distintas instituciones. También se anunció la próxima ratificación del Convenio del Plan maestro con la comuna capitalina para lo cual se revisará el texto original.

El ministro Griffith informó que se conformará una mesa técnica de los representantes de cada una de las instituciones que integran el Consejo, mencionó que se hizo hincapié en que toda la cartelería y señalética en el Paraguay y, principalmente, en el CHA, sea bilingüe. Participaron, el presidente del Consejo, Ramón Jiménez Gaona, ministro de Obras Públicas, la ministra de Hacienda, Lea Giménez; el ministro de Industria y Comercio (MIC), Gustavo Leite; el ministro de Educación y Ciencia (MEC), Enrique Riera; y el ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Guillermo Sosa; además de la ministra de la Secretaría Nacional de la Vivienda y el Hábitat (Senavitat), Soledad Núñez; el ministro de la Secretaría Nacional de Tecnologías de la Información y Comunicación (Senatics), David Ocampos; los titulares de la Secretaría de Políticas Lingüísticas, Ladislaa Alcaraz; de la Secretaría Técnica de Planificación, José Molinas; el presidente de Fepasa (Ferrocarriles del Paraguay SA), Roberto Salinas; el encargado de despacho de la Ande, Walter Causarano; el presidente de la Annp (Administración Nacional de Navegación y Puertos), Héctor Duarte; en representación de la Cancillería, Luis Fernando Avalos, director general de Política Bilateral; y el intendente municipal de Asunción, Mario Ferreiro.

 

Breve historia del Centro Histórico de Asunción

“Paraguaý” se llamaba la tava guasú de los guaranies carios -que hoy llamamos Asunción- cuando llegaron los españoles hace cinco siglos.

La historia de la ciudad de Asunción parte desde el 15 de agosto de 1537.  En esta fecha, arribaron a lo que es hoy el puerto de Asunción el Capitán Juan de Salazar y Espinosa y su hueste española. Fueron enviados en misión de conquista y colonización por el entonces rey Carlos I de España y V del Sacro Imperio Romano Germánico, formando parte de la expedición de don Pedro de Mendoza, primer adelantado del Río de la Plata.

Este es el punto de partida de la historia criolla-mestiza, de españoles y guaraníes. Indudablemente hubo confrontaciones y conciliaciones, entre ambos grupos. Estas luchas, en muchas ocasiones fueron sangrientas, a raíz de la rebelión del pueblo kario y las medidas represivas de los conquistadores españoles que impusieron su autoridad, merced a sus armas.

Con el correr de los siglos, el caserío colonial del Centro Histórico de Asunción fue cambiando con la apertura de calles, construcción de casonas, conventos, y cuarteles militares. Fue modificándose lentamente hacia una ciudad más moderna. La mayoría de las edificaciones coloniales fueron demolidas y escasas son las que pudieron llegar en pie hasta hoy.

 

Delimitación del CHA

La ordenanza municipal Número 267/09, sancionada por la Junta Municipal de la intendencia  asuncena delimita, patrimonial y urbanísticamente el perímetro actual del Centro Histórico, denominada Área Nuclear, dentro de estos límites: al norte: la rivera del río Paraguay y la bahía de Asunción; al este el parque Caballero, la avenida Artigas y la calle Brasil. Al sur las calles Fulgencio R. Moreno y Humaitá; y al oeste, las calles Don Bosco y su proyección hasta la bahía de Asunción.

Esta misma ordenanza municipal delimita la denominada Zona de Amortiguamiento del CHA, determinada por la confluencia entre el Centro Histórico y el resto del municipio de Asunción. Esta zona está constituida por el Área Nuclear del Centro Histórico y las siguientes calles o avenidas de la capital: al este Capitán Figari, Pettirossi, Curupayty, Mariscal López, San José y Artigas; al sur Gaspar Rodríguez de Francia y su continuación Ygatimi; al oeste Don Bosco, Piribebuy, Patricios, Díaz de Pefaur y Stella Maris, siguiendo hasta la bahía; y al norte, rivera del río Paraguay y la bahía de Asunción.

 

Composición de la superficie del CHA

El perímetro del CHA está asentado sobre una superficie total de 300 hectáreas de las cuales 147 son edificaciones. De este total, 22 hectáreas corresponden a edificios en mal estado, 12 a terrenos vacíos y 7 a edificios en desuso.

Sobre las 300 hectáreas existen 491.000 m2 de edificios patrimoniales, los que se distribuyen en 2 por ciento de patrimonio monumental (9.820 m2), 15 por ciento de patrimonio arquitectónico (73.650 m2), 21 por ciento  de patrimonio ambiental (103.110 m2), y 62 por ciento de patrimonio de interés -propuesta del Plan CHA- (304.420 m2).

 

Arquitecto Lisandro Cardozo