Edición N° 372 - Abril 2014

Hábitat

El acuífero Patiño está contaminado con coliformes fecales

Todo lo que se tira a los arroyos lo contamina y esto llega hasta los acuíferos, según expertos de la Seam.

Las aguas superficiales, arroyos, que cruzan las ciudades y principalmente la Gran Asunción, son en gran parte vertedero de residuos sólidos y están contaminadas, lo que ya afecta a los acuíferos, en especial al Patiño, reconoció Sofía Vera, directora de Recursos Hídricos de la Secretaría del Ambiente (Seam).
La sobreexplotación de los acuíferos es un problema palpable actualmente, así como lo es la contaminación. Uno de los más afectados es el Patiño. Lo llamativo es que, en los últimos análisis que se hicieron de las aguas subterráneas de la zona del este acuífero, están saliendo con coliformes, expresó Vera.
Varios son los factores que podrían arrojar tal resultado; uno de ellos son los pozos someros que se fueron cargando con basura o se usaron como pozos ciegos. De ahí la preocupación de la contaminación del acuífero, que nutre al sistema de distribución de agua en la Gran Asunción: Areguá, Central, Capiatá, Itauguá y Ñemby.
Es necesario “insistir con los municipios que son los responsables en la recolección de estos desechos y la disposición final adecuada de los mismos”, insistió la funcionaria.
Por falta de alcantarillado sanitario en las ciudades, estos arroyos también reciben descargas de efluentes domiciliarios y cloacales en ciertos casos, aparte de los efluentes industriales, algunos sin tratar y otros tratados a medias, mencionó Vera y citó los efluentes de mataderos, frigoríficos, curtiembres, domiciliarios, aguas de lluvias con arrastres de los residuos de las calles, más residuos sólidos.
“La gente no entiende que no debe tirar basura a los cauces hídricos ni en las calles, porque con una gran lluvia van a parar a los cursos de aguas, o bien, trancan las alcantarillas, que ni mantenimiento se les hace. De esa manera se contaminan las aguas, sean superficiales o subterráneas, porque hay acuíferos que se recargan de las aguas superficiales, como así también aguas superficiales que se tratan para consumo humano y cuando más contaminadas estén más difícil y costoso es potabilizar”, añadió.

Acuífero Guaraní
Abarca la zona de Itapúa, Misiones, Ñeembucú, Caaguazú y Alto Paraná. Se encuentra en mejores condiciones según muestras que se llevaron a analizar en Alemania, hace menos de cinco años.
Sin embargo, el temor que se tiene es que llegue a contaminarse con los agroquímicos porque son zonas de producción.
Otro de los acuíferos es el Yrendá, hacia el Chaco superior, sobre el cual realizan una consultoría para saber el estado en que se encuentra este recurso.

La recuperación es tarea de todos
Para pensar en la recuperación de los cauces hídricos, la Seam apuesta llevar adelante plantas de saneamiento, evitar que se arroje basura clandestina, mejorar sistemas de saneamiento para el abastecimiento de agua potable ya que más del 90 por ciento de aguateras captan agua de pozos profundos mientras la Essap (Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay), y algunas otras prestadoras tratan con aguas superficiales.
La mayoría de ellas utilizan aguas del acuífero Patiño que contiene coliformes y nitratos en sus análisis, por eso es importante cumplir con el marco legal, pues hasta el momento, la franja de protección de los acuíferos y de las aguas superficiales no se respetan. A ello se suma la invasión de los humedales.
Las funciones que tienen los acuíferos son el de suministrar agua para mantener los cursos de aguas superficiales estables, producir el vital líquido para el consumo, absorber el exceso después de lluvias o reservar en época de escasez.