Edición N° 425 - Septiembre 2018

La Arquitectura y el cine trae nuevos títulos para disfrutar

 

 

El ciclo organizado por la Facultad de Arquitectura, Diseño y Arte (Fada), permite a los cinéfilos reencontrarse con películas memorables y conocer las nuevas producciones cinematográficas que difícilmente llegan a salas comerciales.

Esta actividad cultural de extensión se inició como un espacio dedicado a la comunidad educativa (los alumnos de la carrera obtienen créditos académicos) y al público en general interesado en tener un acercamiento a la dimensión arquitectónica a través de la óptica cinematográfica.

La propuesta selecciona películas que guardan relación con el diseño y la arquitectura y en cada jornada se presenta una breve síntesis de la producción con informaciones de interés. En esta ocasión se han seleccionado las películas La chica desconocida, Un pez llamado Wanda, Después de la tormenta, y Una buena esposa.

La cita es en el Aula Magna de la Fada, Campus San Lorenzo, todos los martes a partir de las 18, con acceso libre y gratuito.

 

Martes 4. La chica desconocida (La fille inconnue, 2016). Realización franco belga, de 113 minutos de duración, el filme ha sido dirigido por los hermanos Jean Pierre y Luc Dardenne e interpretado por Adèle Haenel (Jenny Davin), Olivier Bonnaud (Julien), Jérémie Renier (el padre de Bryan), Louka Minnella (Bryan), Olivier Gourmet (Lambert hijo), Fabrizio Rongione (el doctor Riga), y Christelle Cornil (la madre de Bryan).

El argumento presenta a la eficiente doctora Jenny Davin que trabaja en el dispensario del Hospital Kennedy. Una noche toca el timbre del consultorio alguien y ella ordena a su asistente que no atienda dado que no parece ser una emergencia. Al día siguiente, la policía le solicita a Jenny entregar la película de seguridad filmada frente a su edificio porque una adolescente ha sido encontrada muerta en la calle y hay necesidad de investigar el caso. Jenny se siente culpable por no haber abierto la puerta, se obsesiona y comienza a investigar por su cuenta.

Los hermanos Dardenne -dedicados a filmar situaciones de jóvenes sin trabajo-, en esta oportunidad tienen por protagonista a una chica dedicada a su profesión de médico pero que comete un error que intenta corregir tardíamente. La chica desconocida es una película de tono social -como corresponde a los hermanos belgas- con algún sesgo policial pero con un estudio del ambiente ciudadano tanto en sus aspectos negativos como positivos, de sumo interés .Una película de los Dardenne siempre es estimulante para la reflexión.

 

Martes 11. Un pez llamado Wanda (A fish called Wanda, 1988). Esta producción de Inglaterra y Estados Unidos dura 108 minutos y cuyo director es Charles Crichton, tiene en sus roles principales a John Cleese (Archie Leach), Jamie Lee Curtis (Wanda Gershwitz), Kevin Kline (Otto), Michael Palin (Ken Pile), y Marie Aitken (Wendy).

En Londres, George Thomason, su seductora novia norteamericana Wanda y su socio Ken planean su último delito: robar un diamante que vale 13 millones de libras esterlinas. El plan consiste en abandonar el país luego del atraco; por recomendación de Wanda, contratan a su hermano, Otto, un ex agente de la CIA experto en armas, quien en realidad no es hermano de Wanda. Ella es en realidad una delincuente doble que, además, resulta ser una delincuente triple, pues su intención es eliminar a Otto luego del robo. La verdad es que George es arrestado sin saber lo que está pasando.

Charles Crichton, experimentado director de comedias, logró una incomparable comedia policial con ribetes disparatados sumamente ingeniosos y divertidos con la complicidad de un elenco muy bien seleccionado. Un pez llamado Wanda fue una de las más estimulantes comedias hilarantes de la década de los ochenta del Siglo XX, sin lugar a dudas.

Kevin Kline recibió el Oscar al mejor actor secundario en 1989.

 

Martes 18. Una buena esposa (Dobra zena, 2016). Procedente de Serbia/Bosnia y Herzegovina/Croacia, el filme dura 90 minutos. Dirigida por la realizadora Mirjana Karanovic, los intérpretes son la propia Karanovic (Milena), Boris Isakovic (Vlada), Jasna Djuricic (Suzana), Bojan Navojec (Dejan), y Christina Popovic (Natasha).

La trama gira en torno a un matrimonio de mediana edad y nivel de vida elevado -Vlada y Milena- que vive en las afueras de Belgrado. La pareja vive día a día defendiendo sus privilegios y protegiendo a sus jóvenes hijos, Natasha, Milos y Katarina. Vlada y su hija Nathasha tienen fricciones por la posición anti serbia de ella debido a las atrocidades cometidas por el gobierno durante la Guerra de los Balcanes, sobre lo cual escribió un libro que fue premiado. Milena visita a su médico para un chequeo de rutina y descubre que tiene un tumor en el seno izquierdo lo que le provoca un pequeño ataque de histeria y comienza a limpiar su casa en profundidad. En el transcurso de esta tarea, encuentra una cinta de vídeo con imágenes de las actividades llevadas a cabo por Vlada durante la guerra, que incluyen el asesinato de civiles.

La ópera prima de Mirjana Karanovic extiende una mirada lúcida sobre el conflicto de los Balcanes, permitiendo al espectador reflexionar sobre la responsabilidad de todos en una guerra entre hermanos y ante todo sobre la pérdida de valores cuando uno se ve afectado por lo que realizan los seres queridos.

El año pasado, el público condecoró la ópera prima de Mirjana Karanović en el 28º Trieste International Film Festival, en la categoría mejor largometraje.

 

Martes 25. Después de la tormenta (Umiyorimo nada fukaku, 2016. Filme japonés de 117 minutos protagonizado por  Hiroshi Abe (Shinoda Ryôta), Yôko Maki (Shinishi Kyôko), Kirin Kiki (ShinodaYoshiko), y Taiyo Yoshizawa (Shinoda Yoshiko) y dirigido por Hirokazu Koreeda.

Narra la historia Ryôta quien con la nostalgia de haber sido un novelista premiado y de éxito, gasta el dinero que gana como detective privado jugando a las apuestas y casi no puede pagar la mesada al hijo habido en su matrimonio. Luego de la muerte de su padre, su anciana madre y su hermosa ex esposa parecen estar ya al margen de su vida. Tomando nuevamente contacto con su familia, Ryôta se debate interiormente por lograr de nuevo el control de su existencia y hallar un lugar en la vida de su hijito, hasta que un tifón de verano les permite a todos recapacitar y encontrar la reconciliación.

Uno de los más destacados directores del nuevo cine japonés, Hirokazu Koreeda -fuertemente influenciado por el legendario director Yasujiro Ozu- nos ofrece nuevamente un cuadro familiar distanciado y deteriorado, en espacios reales -los propios del director en su juventud- para lograr una película de autenticidad emocional y real, con fuerte carga autobiográfica del propio Koreeda.

 

 

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